sábado, agosto 27, 2005

Talking Trio en el 4to BsAs Percusión

El jueves 25/08 , al mediodía, junto a Alfredo Facciollo, nos subimos al nuevo autito de Sergio Mileo y encaramos la autovía 2, armados de una bolsita de sandwichitos preparados cariñosamente por su esposa Gladys. Charla va y charla viene, llegamos bastante temprano a nuestro destino: el Espacio Cultural del Sur, ubicado en Caseros al 1700, a unas diez cuadras al sur-oeste de Constitución. Ahí se desarrolla un festival anual organizado por la Dirección de Música de la Ciudad de BsAs. Nos indicaron donde descargar los instrumentos, sobre el extremo de una enorme carpa, donde nos recibió una enérgica jefa de escenario. Entonces cumplimos con una prueba de sonido en compañia de asistentes, plomos, gente con handys, rodeados de equipos de sonido y luces, máquina de humo etc. Por un momento podríamos haber creído que éramos Luis Miguel. Nos preguntaban cosas como "¿qué mezcla de monitores usan?" y otras cosas que no entendíamos. El show arrancó puntualmente a las 20hs, y para nuestra sorpresa, vimos que la carpa se había poblado de bastante público, que fué aumentando durante el set hasta alcanzar unas 400 personas. Un poco aturdidos por la situación, y sin habernos beneficiado por la prueba de sonido, no tocamos muy bien, pero la gente fué generosa con el aplauso. También acompañaban con palmas, lo cual terminaba de desorientarme. Se había comenzado con un "diálogo de tambores" entre Sergio y un invitado uy especial: Eduardo Avena. En primera fila divisamos la conspicua figura de Roberto "Fats" Fernandez que luego vino a saludar, hablar de boquillas etc.
Nos negamos al bis, porque los grandes artistas somos así de caprichosos. Luego de nuestra huída subieron al escenario las muchachas y los chicos de Mukaito Taiko, un grupo de descendientes y amigos de japoneses, que combinan la percusión tradicional japonesa con movimientos de karate. El resultado fué una combinación estrenduosa, que me daban ganas de salir corriendo ahí nomás a invadir Brasil. Luego hubo que esperar un largo rato, mientras Sergio no dejaba sin abrazar y besar a uno solo de sus colegas percusivos, sea japonés, criollo, o funcionario.
Finalmente el Dunita nos devolvió lealmente a Mar del Plata.

miércoles, agosto 24, 2005

¡Por fin salgo bien en una foto!


Gracias a Luis Furlong (mencionado en la entrada anterior) puedo publicar este trabajo artístico.

lunes, agosto 22, 2005

Jelly Roll en Buenos Aires

19 y 20 de Agosto. Festival de Jazz de Avellaneda, organizado por la UTN, y por la productora Arias-Caíno, en proporciones asimétricas pero igualmente indecidibles.
Llegamos en la madrugada del jueves para alojarnos en un cómodo suite-apart de Corrientes al 1900. Luego de abluciones un corto descanso y nuestra primera visita oficial (Nano Herrera- sobre el que deberemos ocuparnos más adelante en este blog) fuimos conducidos a nuestra primera actividad de festival: comer. (Tenedor libre de buena calidad, induciendo los excesos consiguientes)
Luego, dormir. Al poco tiempo recibimos en sesión simultánea a Marcelo Martinez (ex-Jazz Magazine), Mario Roncell (Horns) y Luisinho (que comenzó su carrera de bailarín de jazz junto a nuestra banda "Viva Buddy Bolden". La visita duró casi toda la tarde. Mario y Luisinho nos relataron incidentes de sus gigs de piñatera, dignos de ser registrados y volcados en un ejercicio más literario.
A las 19 hs fuimos transladados al Teatro Roma de Avellaneda, donde me volví a confrontar respetuosamente a la imagen imponenete del director fallecido Rodriguez Fauré, iniciador de lo que hoy es la Orquesta Sinfónica de Avellaneda. Sin saberlo, fué él uno de los que me impulsaron hacia la música. (Nueva ocasión para ejercitarse en la literatura). Luego de la presentación de el Coro de la UTN, abrió la sesión la banda de Jon Seiger (USA). (Jon se escribe así,..sin h). Estos "All Stars" sonaron significativamente mejores que los que escuchamos anterior mente en Mar del Plata, probablemente debido a los cambios en su sección rítmica que comentaremos oportunamente. Hicieron su repertorio del período All Stars de Armstrong, que Jon imita con una fidelidad sorprendente. Entre bambalinas nos encontramos con Luis Furlong, compañero de mis primeras incursiones en la música, cuando fuí precozmente incorporado a la legendaria Guardia Vieja Jazz Band.
Nuestro Jelly Roll Trio cumplió con su set con algunas vacilaciones iniciales, pero pudimos ir mejorando el rendimiento a partir del segundo tema, y luego con la incorporación de Juan Ignacio Caíno sobre el final, desembocamos en un final satisfactorio.
Luego: Comer
A la mañana de sábado fuimos despertados a las 11 am. para ir a . . .Comer.
Se trató de un asado en una quinta del conurbano. Temo ofender a nuestros anfitriones de la UTN, pero no puedo dejar de señalar que luego de sortear las villas miserias que rodean al Acceso Oeste, fuimos convidados a lo que para mí fué lo más parecido a una fiesta menemista, inducido con champagne con mollejas, continuado con ternero y chancho, acompañado de ensalada de endivias, coronado con doble postre, y rematado con cognac español, whisky importado, cigarros de hoja. Debo de haber estado un poco borracho, porque me sumé a la pizza ritual al final, pero mi sensación era que la música era lo menos importante en esta escena, y que eramos actores involuntarios de un obscuro intercambio de favores.
A la noche declinamos el paseo a Avellaneda, (y la cena consiguiente) y nos dispusimos a sumarnos a la actuación de la banda de Jon Seiger en el Foro Ghandi. El gig comenzó a una hora en la que normalmente yo estaría en mi segundo sueño, pero me encontré fuertemente despertado por el set de Jon y sus músicos. Esta vez no hicieron repertorio All Stars, sino que armaron una virtual jam session que resultó en lo más parecido a lo que se podría haber escuchado en la década del 50, en un after-hours con músicos de la banda de Count Basie u otros con la herencia de Kansas City. A falta de piano Fernando Romeo subió a escena con su corneta ya que piano no había, Ricardo Pellican suplió la base con su guitarra, mientras que Adrian DeFilipo en contrabajo y Alejandro Beelman batería generarban un pulso arrollador. Al frente, Jon con su trompeta al mejor estilo Eldrige y Juan Ignacio en saxo tenor junto con Fernando armaron lo que parecía una sección de caños completa, tirando riffs y solos con una contundencia intimidante. Subir con nuestro trío después fué un poco penoso, pero bueno, se hizo lo que se pudo. La jam siguió por mucho tiempo después, cuando todavía quedaban algunas mesas con oyentes empedernidos.
Jon no quería acostarse cuando nos fuimos del local exhaustos a eso de las 4.30 AM, de modo que seguimos charlando en un bar cercano hasta las 6.30AM junto a Ferio y Andrés. Ahí pudimos acercarnos un poco a la humanidad de Jon, que es realmente un ser especial.

jueves, agosto 18, 2005

Doblete en Orion

Todavía me estoy recuperando de la tocada del viernes pasado 12/08/05, donde Dársena 7 compartió la escena con el Jelly Roll Trio. Fué un estreno para el trío, que busca fogueo en vista de su participación próximamente en el Festival de Avellaneda. Poco público general, pero abundante presencia de músicos que fueron caritativos a la hora de comentar el debut. Todavía no me sobrepongo al gesto de Daniel Hoyos, que me regaló un CD del Tiny Bell Trio liderado por el trompetista Dave Douglas. Música excelente, y bien representativa de la dirección que está tomando el jazz contemporáneo en el mundo.
Una nota especial fué la presencia del baterista Roque Figliuolo, que vino a tocar como reemplazo de Daniel Izarriaga. Roque está un poco borrado de la escena jazzera local, y esa noche demostró su solvencia tocando a primera vista y con gran energía todo el repertorio de Dársena.

martes, agosto 09, 2005

Jelly Roll Trío y los poetas

Ferio Espinosa (contrabajo) y Andrés Paez (banjo), junto con quien escribe, formamos el Jelly Roll Trío del que hablaba en la entrada anterior. Venimos trabajando desde hace un tiempo para formar un repertorio formado principalmente por los temas registrados en 1926 por Jelly Roll Morton, con sus Red Hot Peppers. Como es una reducción algo inusual, nos está costando trabajo lograr el nivel que deseamos antes de afrontar compromisos importantes sobre la que informaremos oportunamente. Mientras tanto aceptamos algunos gigs para foguearnos en lugares poco habituales para la grey jazzera de Mar del Plata. Así el sábado 7 tocamos en un encuentro de poesía celebrado en La Rada. Pese a que tocamos bastante mal, la asamblea de poetas nos premió con una gorra con cuyo contenido adquirimos:
1)Pizza abundante de pizzería cheta. (No la vamos a mencionar para no regalar publicidad en nuestro medio de amplia circulación. Además era cara y no tan buena)
2) Una gaseosa grande.
3) Un kilo y medio de helado.