lunes, julio 29, 2013

Contusión : Una lesión profunda que no presenta signos exteriores.

Teatro el Séptimo Fuego -28-07-13 -Contusión-Obra teatral escrita y dirigida por Carla Maliandi- Actuación de Anahí Pankonin -Julián Calviño y Eduardo Iacono- Música original compuesta por Julian Maliandi (gtr) y ejecutado en vivo junto a Fabio Maliandi (flt) y Martin DeLassaletta (dbl bass).

Vuele mi empeño, mi esperanza vuele...
La vida mía debió ser horrible
Debió ser una arteria incontenible
y apenas es cicatriz que apenas duele.

El último verso del poema "Frente al Mar" de Alfonsina Storni resume la situación de una sociedad que no puede saldar lo inenarrable de su historia. Que sacrificó una generación de jóvenes que como en el poema, miraban el mar e intentando estar a su medida.  Quedaron quienes todavía no pueden desentrañar los efectos de la catástrofe. Un colectivo frágil e inseguro se dirige al mar...síntoma de lo inacabado y fallido. (Experiencia que todos los marplatenses conocemos demasiado bien). Pasajeros que o bien no protestan, o se enardecen en una queja impotente. El horror no puede ser mirado de frente, se lo intenta contemplar de soslayo..aún negar...el legado de la historia no puede ser retomado sino en fragmentos, en pequeños rasgos o rastros testimoniales.
La obra de Carla Maliandi podría entenderse como uno de nuestros intentos por atender esa cicatriz que apenas duele, pero que responde a un golpe tremendo a nuestras aspiraciones e ideales. Tiene el poder de transportarnos a esa noche de dudas, reproches y ambigüedades. Lo hace mediante diálogos sencillos, un lenguaje franco y poco afectado, pero que no dispensa al espectador de intentar procesar la escena. Labor que justifica la existencia del verdadero teatro...
La música introduce la acción con una melodía persuasiva que pareciera impulsarnos al viaje. Es la misma que, luego del interregno dramático puntuado por pequeños toques y fragmentos improvisados, acompaña el movimiento de salida que nos devuelve a la cotidianidad, a la existencia tolerable pero adormecida. 

jueves, julio 11, 2013

Exhibición fotográfica festival ICM en Espacio Bua

Hola....soy Garmendia. Me tomé una larga licencia, pero aquí estoy nuevamente para comentar la escena marplatense de jazz. Resulta que se hizo una exhibición de fotos del  festival de ICM realizado en 2012.
Ahí decía que las fotos las habían sacado un tal Nicolas Santiñaque y otro de nombre Pancho Gidoni.
Para empezar diría que tardaron un rato en sacar a relucir las fotos, pero bueno, ahí estaban. Lástima que en blanco y negro...hoy en día hay buena fotografía en colores muy buena...hasta mi celular saca fotos en color. En fin, las estuve mirando un rato. Algunas están buenas pero algunas no las entiendo, como por ejemplo la del piano o el del saxofón que están solas, sin intérprete. Que se yo, creo que un instrumento va  con un músico ¿no?. Por ejemplo, había al frente y a la derecha, como presidiendo la exposición, una imagen realmente impresionante. Era de un trompetista cuya expresión concentrada mostraba no solo la excelencia de su música, sino la luz que irradiaba su ser fulgurante. Seguramente el fotógrafo lo retrató cuando estaría expresándose con emoción,  construyendo una frase milagrosamente formulada, o un sobreagudo atronador.  Luego de permanecer magnetizado por la personalidad de ese interprete, me fui al hall donde me serví todas las veces que pude de los vasos de vino, y de los sandwiches de miga, que estaban re-buenos. Creyendo que nadie lo veía, observé cuando un sujeto que apodaban "Barto" se metía varios sandwichitos en el bolsillo de su camperón. 
También pasaban música...pero aquí hay otra cosa que no entiendo de esta gente. Usaban un tocadiscos viejos donde pasaban unos viejos LP. Cuando les pregunté porque usaban esa antigüedad a uno de los personajes que parecía como organizador me contestó "No hay nada mejor que los vinilos, loco". La verdad es que él no me pareció muy cuerdo. 
Cuando me estaba por ir vi que iban a tocar un poco de música. Eran un guitarrista llamado Sebastián Del Hoyo, y un saxofonista de nombre Juan Manuel Martinez.  El guitarrista tocaba bastante bien, pero yo le diría que le meta un poco más de ritmo a la cosa, algo que sirva más para bailar. El del saxo también andaba bien, pero tocó un solo tema y se fue...no sé si se enojó o algo. 
En fin, no estuvo mal. A la salida aproveché para tomarme unos vinitos más.

viernes, julio 05, 2013

Rafael Morelli R.I.P

Ayer tuve noticias del fallecimiento el día miércoles del Mtro. Rafael Morelli. Trompetista de gran calidad, actuó en los niveles más calificados del género sinfónico, destacándose en distinas expresiones de la música clásica. Se introdujo en la música desde muy pequeño, asistiendo al centro“Infancia Desvalida” de Rosario, donde tomó sus primeras clases bajo la dirección del maestro y compositor Alfredo Serafino. Compartió ese humilde comienzo con otro compañerito, Ruben Barbieri, con el que siempre mantuvo una amistad. Éste último es por supuesto más conocido por nosotros en el ambiente jazzero. Pero hay un paralelismo en la vida de estos dos músicos, marcados por aquel comienzo humilde, la excelencia, el bajo perfil y sobre todo por su sujeción a una ética intachable.
Nuestra relación con el Mtro. Morelli es clave en tanto fue el maestro de trompeta de Valentin Garvie. Su rol no se limitó a trasmitir los fundamentos racionales para la correcta ejecución del instrumento, o las formas estilísticas tan críticas en la música académica. Fue un consejero hábil para aconsejar en las complejas relaciones humanas que se producen en la vida de un músico. Su estilo prudente y regido por principios  ofrecieron un camino que Valentin supo aprovechar bien. 
Vayan estas palabras para la despedida del querido Mtro Morelli. Son tomadas de un poema escrito por un familiar de Big Ike, cuyo funeral relatamos en las entradas anteriores.

Se ha ido

Puedes llorar porque se ha ido
o puedes sonreír porque ha vivido.
Puedes cerrer tus ojos, y rezar por que vuelva,
puedes abrir tus ojos y contemplar lo que nos ha dejado.
Tu corazon puede estar vacío porque no lo puedes ver
o puedes estar colmado del amor que has compartido.
Puedes darle la espalda al mañana y vivir ayer,
o puedes estar feliz por mañana a causa de ayer.
Puedes recordarlo en tanto ya no está,
o puedes mantener viva su memoria.
Puedes deshacerte en lágrimas, 
cerrrar tu mente,
dar la espalda,
o puedes  hacer lo que él hubiera querido:
Amar, y seguir adelante.